Timothy Wilson recibe cadena perpetua por abusar y torturar a su hijastro de 11 años de edad, en las inmediaciones de Orlando, Florida. Quien lo rescató fue la mesera de Mr Potato Flaviane Carvalho. El criminal obtuvo varias condenas y se espera que no salga de prisión.
Timothy Wilson maltrataba a su hijastro de 11 años
Timothy Lee Wilson, de alrededor de 36 años, obtuvo varias condenas por cargos de abuso infantil agravado con un arma, abuso infantil agravado, negligencia infantil y detención ilegal. El niño, de tan solo 11 años de edad, fue rescatado por un gerente de restaurante de la ciudad de Orlando, en Florida.
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Hoy, viernes, se le condenó al padrastro a cadena perpetua, debido a sus numerosas denuncias. El infante tenía hematomas en partes de su cuerpo.
La cadena perpetua se consiguió después de que se analizará los cargos y le adjudicará las penas máximas en cada una de ellas.
El recuento de los daños
De acuerdo al Departamento de Policía de Orlando, Flavaine Carvalho se encontraba trabajando en Año Nuevo, en el año pasado, en el restaurante Mrs. Potato, en South Kirkman Road, cuando llegó una familia compuesta por cuatro miembros y se sentaron en una mesa.
Los agentes de policía dijeron que Wilson no dejó que el infante de 11 años pidiera comida y que Carvalho se dio cuenta de que el chico tenía moretones en el rostro y en los brazos.
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La madre del infante, Kristen Swann, también tiene diferentes cargos por maltrato y se presentó a una audiencia de declaración y sentencia hoy, viernes. El juez encargado del caso, tomó su declaración, sin embargo, reprogramó su sentencia para el 16 de septiembre, para que Swann resuelva sus asuntos antes de que se le dicte sentencia.
Así lo salvó
En palabras del Departamento de Policía de Orlando, Flaviane se encontraba trabajando y atendiendo mesas cuando vio a la familia llegar al rededor de la 11:0 pm. Actuaban con normalidad, sin embargo notó señales de maltrato en los brazos del niño.
En ese momento decidió escribir una nota que decía:
“¿Necesitas ayuda?”.
Luego se la mostró al chico mientras estaba de pie, detrás del padrastro, para que este no pudiera verlo.
El niño confesó los incidentes de maltrato en una entrevista con los agentes de la ley. Dijo que tenía correas de trinquete atadas en sus tobillos y el cuello. También señaló que se le colgó boca abajo en una puerta, que lo golpearon con una escoba de madera, que lo esposaron y lo ataron a una carretilla de mudanzas.