La semana pasada, cuatro estadounidenses fueron víctimas de un secuestro en México. Los hechos tuvieron lugar en Matamoros.
De las víctimas del secuestro en México, fallecieron dos y otros dos vivieron para narrar el horrible momento.
Hasta ahora, el gobierno mexicano se ha mantenido hermético respecto a los motivos que llevaron a los hombres a perpetrar el crimen.
No obstante, la Procuraduría General de Justicia del estado de Tamaulipas, volvió a poner sobre la mesa la teoría de que se trataba de una confusión de identidad.
ALERTA: Secuestran a cuatro ciudadanos de los Estados Unidos en México
Ahora se tienen dos sugerencias específicas: una banda de narcotraficantes los confundió con rivales estadounidenses o incluso, contrabandistas de humanos.
No sabían que se dirigían al secuestro
Tal parece que sin imaginar la peligrosidad del territorio al que estaban por ingresar, el grupo de viajeros originarios de Carolina del Norte se dirigía hacia su rapto.
La pesadilla que duró cuatro días, convocó a medios de comunicación y autoridades estadounidenses a alzar la voz y emprender la búsqueda.
Al tiempo en que los ciudadanos estadounidenses eran trasladados a las casas de seguridad para evitar ser rastreados, Estados Unidos exigía su liberación.
La presión del gobierno estadounidense
Esta petición, además de recuperar con vida y a salvo a los viajeros estadounidenses, significaba también otra cosa: de no liberarlos, estarían en problemas.
Para ser precisos, tanto autoridades estadounidenses como mexicanas, ya habían redoblado los esfuerzos de búsqueda.
Por ende, era latente un doble castigo y presión para los culpables.
Si el motivo era el rescate, ahora era muy remotamente probable que este se pagara.
Entonces, fue mucho más fácil liberar a los estadounidenses y desviar parte de la atención que ya estaba sobre el cártel.
Para Alejandro Hope, analista mexicano de la guerra contra el narco, lo siguiente podría explicar su liberación:
“Podrían haber tenido conexiones o contactos con la policía local y simplemente les dijeron a sus contactos dónde estaba su casa de seguridad”, dijo Hope.
Lastimosamente, los secuestros en México son cada vez más comunes.
Tan solo en 2022, el país alcanzó la cifra de 100,000 personas desaparecidas en su territorio.
Gran parte de estos se realizan con absoluta impunidad y los casos de éxito están contados.
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Paradójicamente, el caso de los viajeros estadounidenses se resolvió con velocidad récord. Lo que provocó reacciones de frustración en redes sociales.
Los usuarios mexicanos, detallaron con pesar que cuando desaparece uno de los suyos pueden pasar días antes de que comiencen las búsquedas.
Otros tantos detallaban que muchos jamás eran encontrados.
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Quiénes eran los secuestrados
Se trata una mujer que viajaba para someterse a un procedimiento médico, iba acompañada de tres amigos.
Así lo aseguraron el pasado martes a CNN sus familiares.
Fueron identificados como Latavia “Tay” Washington McGee, de 33 años, quien condujo a México con Shaeed Woodard, Zindell Brown y “su amigo Eric”.
El principal motivo de realizarse el procedimiento en México, fueron los altos costos de salud en los Estados Unidos, encontrando en México alternativas económicas.
Los cuatro estadounidenses, sufrieron el ataque luego de cruzar a México. Después los llevaron a la fuerza en una camioneta tipo pick-up por hombres armados, informó el FBI de San Antonio.