Miami Fl.- Una jueza federal ordenó al estado de Florida y a la administración Trump a detener la construcción, suspender el ingreso de nuevos detenidos y comenzar a reducir las operaciones en el centro de detención ubicado dentro de la Reserva Nacional Big Cypress en los Everglades, conocido como “Alligator Alcatraz”.
La decisión responde a la demanda presentada por Friends of the Everglades, el The Center for Biological Diversity y la Tribu Miccosukee, quienes denunciaron que la construcción de esta instalación masiva se realizó sin cumplir con los requisitos de revisión ambiental que exige la ley.
“Esta es una victoria histórica para los Everglades y para los estadounidenses que creen que esta área silvestre en peligro debe ser protegida, no explotada”, afirmó Eve Samples, directora ejecutiva de Friends of the Everglades.
En su fallo de 82 páginas, la jueza Kathleen Williams señaló que la operación del centro supone un grave daño a la fauna, las especies en peligro de extinción y los frágiles ecosistemas de los Everglades. La orden preliminar otorga un plazo de 60 días para la reducción ordenada de operaciones.
El centro de detención fue levantado en pleno corazón de la Reserva Nacional Big Cypress, uno de los primeros refugios naturales de Estados Unidos, hogar de humedales sensibles y de al menos una docena de especies en peligro de extinción, como la pantera de Florida y el murciélago bonete de Florida.
Para construirlo, los gobiernos estatal y federal pavimentaron más de 20 acres de terreno virgen, instalaron kilómetros de cercas con iluminación de alta intensidad, habilitaron un estacionamiento para 1,200 autos y espacio para 3,000 detenidos, trasladando a miles de personas y contratistas a un área ecológicamente frágil.
“Presentamos testigos que expusieron el caos ambiental provocado y el desprecio por la ley de los acusados, quienes solo llevaron a un testigo incapaz de justificar la necesidad del proyecto, mucho menos su legalidad. Probamos nuestro caso y celebramos que el tribunal haya emitido una orden preliminar contra esta farsa”, dijo Paul Schwiep, abogado de las organizaciones demandantes.
“El gobierno no puede simplemente levantar un centro de detención en medio de los Everglades sin revisión ambiental ni participación pública. Por eso existen leyes ambientales: para proteger los humedales de los que todos dependemos”, expresó Tania Galloni, abogada de Earthjustice quien celebró la decisión.
“Esta orden judicial es un gran alivio para millones de personas que aman los Everglades”, declaró Elise Bennett, directora del Center for Biological Diversity en Florida y el Caribe. “Este brutal centro de detención estaba destruyendo la esencia de la vida que sustenta nuestro humedal más emblemático y a una gran cantidad de especies en peligro de extinción. La orden del juez llegó justo a tiempo para evitar que todo se desmoronara”.
La orden judicial preliminar se mantendrá vigente mientras continúa el proceso legal, y de confirmarse la sentencia, el gobierno federal deberá realizar un estudio de impacto ambiental completo, como lo exige la Ley Nacional de Política Ambiental.
Hasta el momento, el gobierno de Florida no ha emitido una reacción a la orden de la jueza.