Por Peter Vivaldi
El autoritarismo de Nicolás Maduro en el Caribe resalta la importancia estratégica de Puerto Rico para Estados Unidos. La Isla no es un territorio lejano: es vital para nuestra seguridad, economía y democracia. Merece los mismos derechos que cualquier otro estado de nuestra unión.
Florida ha sido un aliado clave. Tras el huracán María, miles de floridanos acudieron a ayudar, reforzando los lazos históricos con Puerto Rico. Sin embargo, décadas después, los puertorriqueños siguen sin representación plena en decisiones que afectan su vida diaria. Esto no es solo injusto: es inadmisible.
En los últimos meses, pequeños grupos promueven la independencia como si representaran a la mayoría. La realidad es otra: la gran mayoría de los puertorriqueños quiere unirse plenamente a nuestra democracia. La estadidad es la solución justa y necesaria.
Es hora de que el Congreso y el Presidente actúen con decisión. Convertir a Puerto Rico en el 51° estado no solo es un acto de justicia; es estratégico, moral y político. Estados Unidos debe actuar ahora. Puerto Rico importa. ¡No esperemos más!
Peter Vivaldi, es analista político repblicano y aboga por la estadidad de Puerto Rico.

