Ayer, lunes, se cumplió el décimo aniversario del DACA. Una legislación que permite a los jóvenes indocumentados tener la oportunidad de vivir y trabajar en Estados Unidos.
Décimo aniversario del DACA, un sueño de la infancia migrante
El DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, en español), es uno de los programas más importantes para los migrantes dentro de los Estados Unidos. Ayer, lunes, esta iniciativa cumplió una década, unos diez años donde se comenzaron a aceptar solicitudes para otorgar a cientos de miles de jóvenes indocumentados, la oportunidad de vivir y trabajar en la nación estadounidense.
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Quieren que sea permanente
A pesar de la larga permanencia del programa DACA en Estados Unidos, las organizaciones de defensa de migrantes, tales como United We Dream (UWD), señalaron que se trata de una medida temporal. Por ello, se pide que esta iniciativa se vuelva algo permanente dentro de la ley de los Estados Unidos.
La organización se expresó al respecto:
“Su hogar está aquí y es por eso que el Congreso debe brindar protecciones permanentes para millones que permanecen en el limbo y aquellos que nunca calificaron para DACA en primer lugar”.
Este llamado de la UWD llega después de tantas peticiones de los republicanos en deshacer de la medida de una vez por todas.
La UWD también pidió a las autoridades que procesaran las 80 mil nuevas solicitudes que USCIS recibió y que no se tomaron en cuenta debido a la última decisión del juez Hanen.
No es un seguro para conseguir la permanencia
A pesar de que el DACA significa un gran respiro para alrededor de 600 mil migrantes indocumentados que hicieron su vida en Estados Unidos, esta iniciativa solo es temporal. El DACA no asegura la oportunidad de obtener la residencia permanente en los Estados Unidos, y después de los esfuerzos de Donald Trump por eliminarlo, se desconoce su futuro.
Los beneficiarios del DACA deben de renovar sus solicitudes cada dos años y, además, pagar alrededor de $500 dólares. Todo esto se debe de realizar para seguir teniendo el derecho de trabajar y mantener la protección contra la deportación.