Emma Stone habla sobre los retos de personificar a la emblemática villana de Disney, Cruella. “Hay curvas emocionales” relata.
“Es un ser humano, claro que tiene debilidades” afirma Emma Stone
La película de ‘Cruella’ es protagonizada por la famosa actriz pelirroja, Emma Stone. En el filme retratarán los orígenes rebeldes e infames de la emblemática villana favorita de muchos(as).
La villana de Disney es bien conocida por su obsesión con la moda y el estilo. Esta película promete tanto porque se centrará en la historia detrás de la máscara que conocemos. Nos mostrará a una mujer que tuvo que luchar contra sí misma y su lado perverso, mostrando la realidad de la humanidad, donde nada es blanco y negro. Contamos con matices y múltiples facetas.
Emma Stone explicó que Cruella no es un personaje al que alguien aspira a ser, porque demuestra la realidad de la sociedad. Seres humanos con debilidades, fortalezas, miedos y un lado no tan bueno.
“Es un ser humano, claro que tiene debilidades. Esta película retrata la forma en que ella las combate y el conflicto que tiene entre su naturaleza versus su crianza, pues su madre la educó para ser de una manera, pero ella es de otra. Su volatilidad, sus reacciones, su ingenio y creatividad son sus fortalezas. Me parece que Cruella es una muestra de que, algo que podría hacerte vulnerable, se convierte en los puntos que te hacen fuerte de alguna manera. Este definitivamente no es un personaje aspiracional”.
Afirmó la actriz en una rueda de prensa.
“Ella aprovecha su creatividad y todo su potencial para fortalecerse, está aprendiendo a aceptarse y eso la ayuda a obtener lo que quiere. Este personaje tiene muchos aspectos oscuros que no son algo positivo, pero si lo piensas no son debilidades, incluso hay cosas que la siguen fortaleciendo”.
Agregó.
¿Cuáles fueron los retos de personificar a la gran villana de Disney?
Ya que Cruella es un personaje con múltiples facetas, la actriz aseguró que fue un gran reto interpretarla. Primero que nada, porque la historia toma lugar en Londres en los años 70 y ella es originaria de Arizona.
“Los acentos fueron difíciles de aprender y hay curvas emocionales que causan momentos profundos y conmovedores. Hay una gran presión porque solo tienes ese instante para conseguirlo, no importa lo cansada que estés o los sentimientos que tengas en ese momento. Pienso que siempre duermo por la noche anterior al rodaje de uno de esos momentos cruciales de la película porque para mí es uno de los retos más grandes pero me encantan“.
Expresó entusiasmada.
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