Desde hace seis meses, Frank Rubio habita el espacio exterior. Pero podría cumplir un año orbitando La Tierra debido a una falla en su nave.
La misión que Frank Rubio desempeña, es atender diversas tareas de control en la EEI, aunque su paso extendido por el espacio exterior podría significar un récord de permanencia.
Desde hace seis meses, Frank Rubio habita el espacio exterior. Pero podría cumplir un año orbitando La Tierra debido a una falla en su nave.
La misión que Frank Rubio desempeña, es atender diversas tareas de control en la EEI, aunque su paso extendido por el espacio exterior podría significar un récord de permanencia.
De padres salvadoreños, pero nacido en los Estados Unidos, el astronauta de 47 años augura que vendrán nuevas oportunidades para sus colegas de origen latino.
Este proyecto de investigación en la órbita terrestre baja, específicamente en la Estación Espacial Internacional, significa el primer vuelo de Rubio para la NASA.
Tras cinco años de preparación y dos de investigación, el también cirujano de vuelo, fue elegido en 2017, destacando entre más de 18.000 candidatos.
Para formar parte de la tripulación a bordo de la nave rusa Soyuz, Rubio también tuvo que aprender ruso y volar en un avión supersónico T-38 de forma regular.
En una entrevista para la cadena Univision, habló desde la EEI, a nada menos que 250 millas de La Tierra.
“El español me ayudó mucho para aprender ruso”, dijo el estadounidense cuya lengua materna es el inglés. Sin embargo, habla perfecto castellano gracias a sus padres.
Es importante aclarar que no viaja, solo. Le acompañan sus compañeros originarios del país en el este europeo, quienes tuvieron que aprender inglés.
Se trata de los cosmonautas rusos Serguéi Prokópiev, comandante de la tribulación 68 de la EEI, y Serguéi Petelin.
Quienes a su vez, se unieron a otros tres rusos y a los astronautas de la NASA Bob Hines, Kjell Lindgren y Jessica Watkins.
Sin olvidar a la astronauta de la Agencia Espacial Europea (ESA) Samantha Cristoforetti.
En la conversación que sostuvo con Univision, el cosmonauta compartió: “Si vuelvo antes -a la Tierra- estaré feliz por estar con mi familia”.
Esto, como una remota posibilidad de un retorno anticipado. No obstante aseveró que la fuga de refrigerante en la cápsula Soyuz es lo que ha impedido su regreso.
Rubio se convirtió, el 21 de septiembre del año pasado, en el décimo segundo hispano en llegar a la EEI.
Volver a casa y mantener los pies en el piso
Ante su actual residencia y la posibilidad de extender su estadía, dijo que su familia siempre le ha apoyado y es muy positiva.
Recordó con especial afecto las palabras de su madre, quien siempre le dijo que “todo saldría bien”.
A manera de reflexión, reconoció que aún le cuesta acostumbrarse a la gravedad y que
“hay que aprender a estar con los pies pegados al piso”.
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Otros estudios científicos que se llevan a cabo en la Estación Espacial, son los cultivos hidropónicos y aeropónicos, de gran relevancia para el futuro.
Con ellos, se busca analizar si se puede aumentar la comida para futuras expediciones a la Luna y al Planeta Marte.
“Este tipo de experimentos sirven para saber cómo crecen las plantas”, señaló. Pues el objetivo final es conseguir el autoabastecimiento en el espacio.
Otros temas de estudio, son la microgravedad y su impacto en el cuerpo humano, lo que podría arrojar nuevos datos, especialmente si permanece cerca de un año en órbita.
Puertorriqueño va a la NASA como candidato a astronauta
Antes de despedirse, envió palabras de cariño para Miami, ciudad sede de Univision 23.
Y comentó al meteorólogo Javier Serrano, que le encanta “la gente y la comida” de la ciudad en Florida.
Por último dijo que realiza todos los días ejercicio para evitar la pérdida de masa ósea.