James Franco y los demás acusados acordaron pagar $2.2 millones de dólares por la demanda de su caso de abuso sexual a estudiantes.
James Franco busca cerrar caso de abuso sexual
El reconocido actor James Franco accedió a pagar $2.2 millones de dólares por un acuerdo de la demanda en su contra por abuso sexual. Este miércoles publicaron los documentos judiciales. La demanda afirma que intimidó a estudiantes en la escuela de teatro y cine que él mismo fundó, posteriormente las obligó a cometer situaciones sexuales y abusivas sin justificación.
En febrero ambas partes llegaron al acuerdo, sin embargo, requirieron varios meses para solucionar los detalles, además no habían revelado la cifra monetaria.
La demanda contra el actor ocurrió en octubre del 2019, cuando las actrices y ex estudiantes Sarah Tither-Kaplan y Toni Gaal lo denunciaron. Posteriormente, se sumaron más estudiantes. Afirmaban que en su escuela, Studio 4, Franco les obligaba a ‘actuar’ escenas sexuales y cada vez subían más de todo, eran más explícitas en cámara. Esto iba más allá de lo que podían aceptar, explican que parecía un “set tipo orgía”.
El comunicado de ambas partes
Ambas partes lanzaron un comunicado conjunto donde se lee lo siguiente:
“Aunque los acusados siguen negando las afirmaciones en la denuncia, reconocen que los demandantes han planteado asuntos importantes; y todas las partes creen fuertemente que es un momento crucial para enfocarse en atender los malos tratos contra las mujeres en Hollywood”.
Explican.
“Todos están de acuerdo en la necesidad de asegurar que nadie en la industria del espectáculo, sin importar su sexo, raza, religión, discapacidad, origen étnico, género u orientación sexual enfrente discriminación, acoso o prejuicios de cualquier tipo”.
Agregan.
De acuerdo con las acusaciones, Franco “buscó crear un flujo de jóvenes mujeres que eran sujetas a su explotación sexual personal y profesional en nombre de la educación”.
Asimismo, señalan que les hacían creer que actuarían para películas del actor, así les chantajeaban a seguir con estas prácticas sexuales.
También nombraron como acusados a la compañía productora de James, Rabbit Bandini y a sus socios. Entre ellos Vince Jolivette y Jay Davis.
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