La forma en la que la Corte Suprema ha actuado frente a la lucha que se libra contra los contagios por coronavirus, es un parteaguas para lo que le espera a EE.UU.
La Corte Suprema de Estados Unidos demérito este jueves los esfuerzos que lleva a cabo el gobierno de Biden para detener la propagación del covid-19 en el ambiente laboral.
“Estos casos no tienen que ver con la eficacia o la importancia de las vacunas contra el covid-19, solo se trata de si (una agencia federal) tiene la autoridad legal para obligar a los trabajadores de la salud, al coaccionar a sus empleadores, a someterse a un procedimiento médico que no quieren y no pueden deshacer”
Agregó el juez Clarence Thomas oficialmente.
Junto con esto, también informaron lo mucho que los jueces conservadores quieren que el gobierno federal no forme parte de la vida diaria de los estadounidenses.
Los jueces de derecha dieron a conocer su ferviente inquietud ante que las agencias estadounidenses sean las que se encarguen de controlar la vida cotidiana e incluso las libertades de muchos de estadounidenses.
“el Poder Ejecutivo ya toca casi todos los aspectos de la vida de los estadounidenses”
Así lo afirmaron Neil Gorsuch, Juez asociado de la Corte Suprema de los Estados Unidos y el también Juez, Samuel Alito.
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Lo que preocupa en la Corte Suprema
La realidad apunta a que debido al enfoque centralizado a los puntos de vista personales, termine por limitar al poder federal tanto en la salud, protección laboral y las garantías ambientales.
El futuro inmediato tiene, tomando en cuenta los casos que se discutirán en febrero, un enfoque sumamente centrado en el alcance que tendrá la Agencia de Protección Ambiental para reducir las emisiones de las centrales eléctricas.
Y volviendo a la situación de la pandemia, la cual deja casi 1 millón de estadounidenses muertos, esto no fué suficiente para los conservadores para que retrocedieran.
En su lugar, especialmente para tres jueces de extrema derecha, los casos de contagios y muertes ofrecieron una oportunidad de demostrar determinación en esta área de la ley.
Ahora se cierne en la balanza las cuestiones prácticas relacionadas con las acciones del gobierno que buscan proteger la salud pública y junto con esto el medio ambiente, así también como la preocupación sobre la separación de poderes.