Miriam Rodríguez fue una mujer persistente, metódica y valiente. Cazó a los asesinos de su hija, uno por uno, haciéndose pasar por varias identidades. Se convirtió en activista y luchó por las injusticias de otros. Su final fue devastador, pero la convirtió en leyenda. Ahora su historia se convirtió en una película que se presentó en Cannes.
Miriam Rodríguez, una historia real de justicia por propia mano
Los cárteles secuestraron y mataron a su hija, quien solo tenía veinte años de edad; la fecha de la fatídica escena fue en enero del 2012. Miriam Rodríguez sintió el dolor y el fuego de la impotencia en carne propia, la policía no hizo nada; el caso se fue directo a “carpetazo” y ella sintió el desconsuelo de perderlo todo.
La impunidad en las leyes mexicanas es perceptible a simple vista. Casos donde se priva de la vida a gente inocente, secuestro y asesinatos a periodistas, violaciones y mutilaciones a mujeres en varios estados del país; los mexicanos deben de vivir con la indiferencia de la justicia.
Miriam tuvo que soportar la ineptitud de los agentes del estado, quienes no otorgaron ningún resultado contundente a la hora de investigar el caso. La madre tenía que hacer algo, no podía quedarse de brazos cruzados. Su valentía, persistencia y sentido de justicia le dieron el impulso que necesitaba; ella debía de ser la mano justiciera en esta ocasión.
Con una arma de fuego en la mano, identidades falsas y disfraces, Miriam empezó a cazar a los culpables del asesinato de su hija, quien siempre sería su niña dentro de su corazón. Era hora de resolver la impunidad que enfrentaba el caso y con ello en mente, desafió al sistema penal y de seguridad de todo México.
Ella rastreó y arrestó a más de la mitad de los criminales que se involucraron en el caso. La policía no le daba más que obstáculos para meterlos a prisión. Incluso, las autoridades trataron de aprehenderla, sin éxito.
Los cazó e hizo justicia
A lo largo de los años, Rodríguez capturó a la mayoría de los involucrados en el atroz crimen contra su hija. Identificó a quienes pidieron rescate y empezó a investigar sobre sus vidas, a ser amiga de sus allegados, a ganarse la confianza de sus parientes, a involucrarse en sus vidas. En el proceso se enteró de que gran parte de ellos ya no estaban dentro del medio criminal. Se topó con niñeras, pastores cristianos, vendedores de coches y taxistas.
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Con disfraces, identificaciones falsas y un arma de fuego, buscó a todos, los encontró, llamó a la policía y estos procedieron a arrestarlos.
Ella sabía que se exponía a un gran peligro por parte de los cárteles, por lo cual, le pidió protección al gobierno. Ella requería de seguridad con escoltas armados, pero el estado denegó la solicitud y Miriam tuvo que protegerse por su propia mano.
Después de algunas semanas, exactamente en el Día de las Madres en México, Miriam encontró su final frente a las múltiples balas que los cárteles dispararon en su contra. El diez de mayo del 2017, el narcotráfico asesinó a Miriam Rodríguez frente al portón de su casa.
¿Atraparon a los culpables?
Hasta ahora, el caso de la muerte de Miriam Rodríguez sigue abierto, ya que solo se arrestó alrededor de cuatro personas. La Procuraduría de un estado del norte mexicano, informó de tal caso ante la prensa a finales del mes de junio del año 2017.
Irving Barrios, quien era titular de la PGJ (Procuraduría General de Justicia) de Tamaulipas, dijo:
“Primero ubicamos la camioneta en la que huyeron el día del homicidio. Dimos con el dueño de la camioneta, Alfredo Misael Quintanilla, uno de los detenidos. Así ubicamos a “El flaco” Esparza Martínez, el segundo detenido”.
Después de ello, la PGJ de Tamaulipas modificó la recompensa que se ofrecía por los asesinos de Miriam. Esta pasó de un millón de pesos, a ser “una remuneración” para quienes compartieran datos del paradero de los que faltaban.
Aún no se conocen más datos sobre este caso.
“La Civil”, una película que se basa en la historia de Miriam Rodríguez
En el Festival de Cannes de este año, se presentó una película que ahora ya está en boca de todos. Varios de los presentes en la ceremonia se pusieron de pie y ovacionaron a la actriz principal, Arcelia Ramírez. Fue ella quien personificó a Miriam Elizabeth Rodríguez Martínez, en el largometraje “La Civil”.
La película tuvo como escritores a Teodora Mihai, quien colaboró con Habacuc Antonio de Rosario. Ellos se encargaron de que la trama fuera lo más fiel a la historia que les contó Miriam. Ellos tuvieron numerosos encuentros en donde la madre activista les contaba con detalles cada una de sus vivencias después de la muerte de su hija.
En estos momentos, “La Civil” se encuentra en una contienda fuerte por mejor largometraje. Sus principales competidores son “Una cierta mirada” y “Cámara de oro”. La cinta donde aparece Arcelia, tuvo una larga ovación de casi ocho minutos.
Sin lugar a dudas, la experiencia que dejó Miriam es agridulce, ya que desenmascara la impunidad en México y deja ver la indiferencia de los cuerpos de seguridad frente a los actos provenientes de cárteles. Pero tiene partes dulces, porque somos testigos de cómo una persona persistente, valiente y aguerrida se volvió una activista que luchó contra la impunidad hasta el último aliento que tuvo. Miriam Rodríguez es un claro ejemplo de la justicia por propia mano gracias la poca acción de la policía en Tamaulipas y México.