La situación de niños migrantes no acompañados, preocupa. Esto debido a su situación actual, parece ser que algunos de sus refugios cerrarán a manos de la administración de Biden.
Los niños migrantes no acompañados perderán algunos refugios
Algunos refugios de emergencia se cerrarán debido a la administración de Biden. Después de considerar expandir uno de los sitios que servía de refugio para estos niños, el presupuesto ya no se destinará a otros lugares, por lo tanto, tendrán que cerrar sus puertas.
La situación con la migración infantil está en descontrol y se enfrenta a obstáculos cada vez más grandes. El cierre del Fort Bliss se presenta debido a algunos testimonios de los niños que permanecen en las instalaciones. Ellos aseguran que algunos sitios tienen malas condiciones y que abogados y defensores optan por criticar al lugar.
Otras instituciones cerrarán
Hay apoyo por parte de otras instituciones, una de ellas es la Asociación Nacional de Iglesias Cristianas. Ellos apoyaron a los niños migrantes, sin embargo, ahora cerrarán debido a esta medida. Las chicas que estaban en la instalación describieron sucesos indignantes. Estos van desde desmayos, mala alimentación, hambre, falta de ropa limpia y disminución en el uso del baño después de las 22:00 horas.
En juicios que tuvieron lugar la semana pasada, los infantes indicaron que solo se les permitía jugar al aire libre durante una hora diaria. También mencionaron que la privacidad era poca o nula, que tenían muy pocas llamadas con su familia y que dormían durante el día para “matar el tiempo”.
Quedarán desamparados
En estos momentos el Departamento de Salud y Servicios Humanos se encarga de los niños migrantes. Por lo mismo, son ellos quienes están revisando las opciones que tienen para considerar el cierre de Fort Bliss y otros sitios de carácter temporal. Todo esto lo indicó el secretario Xavier Becerra, el día de ayer, lunes.
Por ello mismo hay incertidumbre en cuanto al verdadero plan de la administración de Biden y lo que harán con los niños que encuentren en la frontera. Las cantidades de infantes solo aumentan y los recursos del gobierno se están limitando.
La situación con los niños cada vez es más grave. Dentro de las instalaciones, los infantes piden, incluso, ruegan por regresar con sus familias. Y en algunas ocasiones, los niños se ven envueltos en intentos de secuestro.
Las autoridades los tratan diferentes según su nacionalidad. A parte, las penurias dentro de las instalaciones acarrean consigo la hambruna, la depresión y la desesperación. La administración del presidente Joe Biden trata de establecer un equilibrio ante este problema. Por lo cual, su medida es cerrar algunos lugares que servían como refugio.