La Organización para las Naciones Unidas (ONU), ha adquirido un barco de dimensiones extraordinarias, con el cual esperan evitar un desastre ambiental.
Esta embarcación, será un aliado que la ONU colocará frente a las costas de Yemen.
Cabe resaltar que el Mar Rojo ha sido dañado desde años atrás, a causa de un superpetrolero en descomposición situado en el área.
En suma, son más de un millón de barriles los que han ocasionado el deterioro del Mar.
Actualmente, la alarma es que la vieja embarcación explote en los próximos meses, anticipando uno de los peores derrames petroleros.
Como medida tranquilizante, la ONU afirmó la adquisición de este nuevo barco que retirará el crudo de la antigua motonave.
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El nuevo barco de la ONU
Con esta embarcación, se pretende llevar a cabo la operación eficaz de extracción.
“Marca el comienzo de la fase operativa del plan para extraer el petróleo de manera segura y evitar el riesgo de un desastre ambiental y humanitario”
explicó Achim Steiner, del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El PNUD, informó a través de un comunicado que el barco que compró a la compañía de petroleros Euronav, estaba en mantenimiento en China.
Se espera que llegue a su destino a inicios del próximo mayo.
¿Cuáles eran los riesgos además de la explosión?
Un derrame importante devastaría a las comunidades pesqueras en la costa del Mar Rojo de Yemen, probablemente acabando con 200.000 medios de subsistencia al instante.
Comunidades enteras estarían expuestas a toxinas que amenazan la vida, además de que el aire contaminado afectaría a millones.
Fueron algunas de las alteraciones que Steiner mencionó y por las cuales era urgente esta compra.
En costos, la ONU agregó que limpiar un posible derrame petrolero sería bastante oneroso, pues alcanzaría los 20.000 millones de dólares.
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El desastre ya estaba anunciado
Años atrás, la Organización ya había alertado sobre los posibles escenarios, en caso de no atender el tema con el viejo barco.
Incluso, buscó apoyo de otras organizaciones ambientales y solicitó donaciones a gobiernos e instancias no gubernamentales.
La operación planificada, está valuada en 129 millones de dólares, de los cuales recaudó con éxito 75 millones.
Otros 20 millones están por llegar, pues ya existe una promesa de donación adicional.
Después de que estallara la guerra civil en Yemen, el antiguo barco quedó varado frente al puerto de Hodeida.
Conocido como el FSO Safer, se trata de un superpetrolero construido en 1976, que posteriormente fue designado como almacenamiento flotante de petróleo.
El barco lleva abandonado 8 años
Su condición actual de deterioro, lo mantiene anclado y en abandono cerca de la terminal petrolera de Ras Isa, misma que está controlada por los rebeldes Houti de Yemen.
En cuanto a capacidades de almacenamiento, puede albergar hasta 1,14 millones de barriles de petróleo crudo, y en dimensiones alcanza los 1.233 pies.
Desde el año 2015, ha dejado de recibir mantenimiento, avanzando considerablemente el daño e integridad estructural de la embarcación.
Esto se debió en gran medida a que los hutíes tomaron una buena parte de Yemen y una coalición abanderada por Arabia Saudí intervino para respaldar al gobierno.
Se calcula que el conflicto acumula actualmente a más de 150.000 personas muertas y más de 23 millones más en condiciones de miseria.
Aún nada es definitivo
Si bien lo anterior parecía una luz al final del túnel, Steiner remató con una aclaración que ahora ha vuelto a confundir a la prensa y a los afectados.
“Déjenme ser muy claro: esta es una operación riesgosa y las cosas podrían salir mal”, explicó Steiner
Y añadió que aún podría suspenderse si no logran recaudar suficientes fondos en los próximos días. Reanudando así el llamado a los gobiernos y organizaciones para donar.