Los científicos trabajan a marcha rápida para buscar cómo combatir el virus que amenaza con convertirse en una próxima pandemia en todo el planeta.
Las autoridades indias declararon en emergencia al distrito de Kozhikode, en el estado sureño de Kerala, luego de que se reportaran al menos dos muertes a causa del virus Nipah (NiV).
El Director General del Consejo Indio de Investigaciones Médicas (ICMR), doctor Rajiv Bahl, explicó durante una conferencia de prensa que este virus posee una tasa de mortalidad de entre el 40% y el 70% de los casos.
Para entender la gravedad de esto hace falta revisar la tasa que poseía el COVID-19, la misma que variaba entre el 2% y 3%.
Sin embargo, el propio médico explicó que el Nipah no es tan transmisible como el virus que provocó la pandemia en el planeta en el 2020.
Origen del virus
El primer registro del virus Nipah data de 1998, cuando granjeros de Malasia y Singapur cayeron infectados. Su nombre, de hecho, se debe al lugar donde se detectó el primer caso: la aldea malasia de Sungai Nipah.
Durante ese primer brote se infectaron al menos 300 personas, la mayoría de ellos granjeros que habían estado en contacto con las heces de los cerdos, y fallecieron más de 100.
Pertenece al género Henipavirus y, al igual que el COVID-19, es un virus zoonótico; es decir, se transmite principalmente de animales a personas “y en ocasiones también de persona a persona y mediante comida contaminada”, explica la OMS en su página oficial.
En el caso del Nipah el portador principal es el murciélago frugívoro de la familia Pteropodidae, conocido comúnmente como zorro volador.
“Lo transportan murciélagos frugívoros que se posan en las copas de los árboles (…) Pueden orinar y contaminar la fruta, y cuando la gente come eso, contrae el virus y enferma”, explicó a The Guardian Joanne Macdonald, profesora asociada de ingeniería molecular en la Universidad de Sunshine Coast.
La OMS considera que respecto al período de incubación del virus (entre el contagio y los primeros síntomas) hay una ventana de entre 4 y 14 días. Sin embargo, hay casos donde demoraron hasta 45 días en reportarse los primeros síntomas.
Síntomas y tratamiento
Según la OMS, la infección humana por Nipah puede ser asintomática, causar enfermedad respiratoria aguda o encefalitis letal.
Los infectados suelen presentar fiebres, dolores de cabeza, dolor corporal, vómitos y dolor de garganta. Si la enfermedad se agrava el paciente reportará mareos, somnolencia, alteración de la conciencia y signos neurológicos propios de una encefalitis aguda.
Los casos más graves sufren de encefalitis -una inflamación del cerebro- y convulsiones que llevan al paciente a caer en coma en 24 o 48 horas y, en muchos casos, a la muerte.
¿Riesgo de una nueva pandemia?
Hasta la fecha no existe un tratamiento ni vacuna para el virus Nipah y las atenciones médicas se limitan a combatir los síntomas en los pacientes.
Las autoridades sanitarias de la India prefieren, por ahora, difundir una campaña de concientización, invocando a que la población preste especial atención al cuidado de sus hábitos higiénicos y rastreando las cadenas de contagio para aislar a los posibles infectados.
Este el cuarto brote de Nipah reportado en Kerala desde el 2018. Además de dicha región, también se han registrado brotes de este tipo en Bangladesh y en otras zonas de la India.
La OMS advierte, sin embargo, que países como Camboya, Ghana, Filipinas, Indonesia, Madagascar o Tailandia tienen un alto riesgo de presentar brotes de Nipah debido a que ahí también existen zorros voladores.
Por ello, el máximo ente de salud pública global mantiene a Nipah como un virus con prioridad para vigilar por su potencial pandémico. Sin embargo, al mismo tiempo, se considera que a la fecha es “altamente improbable” que este virus desencadene una pandemia como la que vivimos a causa del COVID-19.