A veces tenemos una lucha existencial entre lo que damos y lo que recibimos a cambio. Y aunque teóricamente, uno Da sin esperar nada a cambio… en la vida real es un poco diferente. Es verdad que los demás no nos tienen que devolver lo que les entregamos, sobre todo si lo hacemos desinteresadamente… Pero al menos esperamos que el afecto que nos profesan, no esté condicionado a eso que reciben de nosotros. porque si es así, entonces tiene otro nombre… ya no se llama afecto.
Yo siempre he pensado que dar de lo que se tiene, es importante para nuestro desarrollo personal… y con el tiempo, he formulado lo que yo le llamo “La Ley del Dar”, teoría que a mí me ha funcionado maravillosamente bien y que seguramente tú también podrás utilizar para entender porque algunas personas Dan… y otras, solo saben RECIBIR.
Aquel que Da algo, es porque lo tiene… porque si no lo tuviera, no podría darlo. Lo que tú le Das a los demás, es tu respuesta al Universo… Lo que ellos hagan con aquello que tú les entregas, es su responsabilidad con SU Universo. Al final… tú eres una fuente inagotable, porque de lo que has dado… SEGURAMENTE TIENES MUCHO MAS.
Por eso, no DES esperando nada a cambio… aquel que es agradecido, en algún momento, también pondrá su mano por ti, cuando lo necesites… En cambio, aquel que solo está ahí, por lo que puede obtener de ti, eventualmente volverá a necesitarlo, porque no tiene nada, ni siquiera para Sí mismo… por eso, solo puede recibir… NO TIENE NADA PARA DAR.
Claro… en ocasiones damos MUCHO a los demás, de manera desmesurada, solo para satisfacer nuestras propias carencias. Carencias que a veces, están sustentadas en la falta de amor propio. Así que tengamos cuidado de que, al momento de DAR, estemos realmente cumpliendo con una misión… y no comprando un poco de amor… Porque, como cualquier otro Ser Humano, sin darnos cuenta, podemos caer en el abismo de dar demasiado de lo que tenemos, para obtener un poco de aquello que nos hace falta. Así que, cuidado con eso porque nos volvemos vulnerables ante los demás… y el proceso debe ser DAR… no que TE QUITEN.
Edwin Ocasio