La serie “Selena & Yolanda: The Secrets Between”, en la cual Saldívar confiesa que no todo pasó como se ha contado a lo largo de los años, se estrenará el próximo 17 de febrero a casi 30 años de la muerte de la cantante.
La querida cantante Selena Quintanilla, una estrella de la música extinguida trágicamente el 31 de marzo de 1995, era un ícono reconocido por su habilidad para navegar a través de géneros como la música tejana, la ranchera, la balada, el pop y la cumbia.
Yolanda Saldívar, quien fungía como presidenta del club de fans de la estrella pop mexicana-estadounidense, fue condenada al ser encontrada culpable de ser la autora de este infausto suceso. Más de dos décadas tras el incidente, Saldívar alega que fue un accidente.
Estas confesiones surgen en el marco de la serie documental “Selena & Yolanda: The Secrets Between Them”, donde Saldívar ofrece una nueva versión de los sucesos, contraria a la narrativa aceptada durante años.
“La verdad dista de lo narrado hasta ahora”; “Me embargaba el temor”; “Poseo conocimiento de sus secretos y creo que es justo que la gente sepa lo que realmente ocurrió”, se le oye decir a Saldívar en un avance de la serie.
En una vuelta adicional al caso, la familia de la otrora líder del club de admiradores profesa tener en su poder documentos y grabaciones inéditas, listos para ser presentados con la aspiración de alinear la percepción pública con su verdad.
La serie documental no solo se nutre de las palabras de Saldívar, sino que también reúne declaraciones de quienes presenciaron la escena del crimen, de los fiscales encargados del juicio y de periodistas especializados en la vida y obra de Selena Quintanilla.
El escenario del homicidio se describe como un enfrentamiento entre Quintanilla y Saldívar, producto de un supuesto desfalco de 30 mil dólares.
Saldívar adquirió un arma, que más tarde devolvió, y el 26 de marzo, solo cinco días antes del asesinato, la recompró, sentando las bases para el trágico evento.
Selena Quintanilla fue disparada por Yolanda Saldívar en un hotel Days Inn en Corpus Christi, Texas. La munición, una bala de revolver calibre .38mm, causaría la muerte de la aclamada artista.
Detalles de la autopsia ilustran el recorrido letal de la bala: entrando por la espalda, atravesando el torso, cortando una arteria vital y saliendo por el tórax.
Convicta por el asesinato, Saldívar siempre mantuvo que fue un disparo no intencional, afirmando que su intención era autoinfligirse daño, no dañar a Selena. «Quería matarme yo, no a ella», abriendo dudas sobre las verdaderas intenciones que tenía en ese momento. Diversas declaraciones a la policía alimentaron la incertidumbre sobre sus verdaderas intenciones.
En el documental del próximo 17 de febrero, se esperan más revelaciones que prometen esclarecer lo ocurrido el trágico el 31 de marzo de 1995.