El horario de verano de 2025 está por comenzar, lo que significa que esta noche se deben adelantar los relojes una hora. Este año, el cambio de horario iniciará el domingo 9 de marzo, cuando a las 2:00 a. m. los relojes se adelantarán una hora, marcando el inicio de días más largos con más luz solar en las tardes.
¿Cómo afecta el cambio de horario?
Cada año, el horario de verano comienza el segundo domingo de marzo y finaliza el primer domingo de noviembre. Durante este periodo, se busca aprovechar mejor la luz natural del día, lo que genera un ajuste en la rutina de millones de personas.
Sin embargo, este cambio no solo implica más luz en las tardes, sino también una alteración en los ritmos circadianos de nuestro cuerpo, lo que puede afectar el sueño y la productividad en los días posteriores a la transición.
¿Perdemos o ganamos una hora de sueño?
Cuando los relojes “saltan hacia adelante”, perdemos una hora de sueño, lo que puede generar fatiga y somnolencia en los primeros días. Por ejemplo, si alguien acostumbra dormir a las 10 p. m., tras el cambio de horario, su cuerpo sentirá que es como si se hubiera dormido a las 11 p. m.
¿Cuánto tiempo dura el horario de verano?
El horario de verano se extenderá hasta el domingo 2 de noviembre de 2025, cuando los relojes volverán a atrasarse una hora para dar inicio al horario estándar de invierno.
Consejos para adaptarse al cambio de horario
Para minimizar los efectos del cambio de horario, los expertos recomiendan:
✔ Ajustar la hora de dormir gradualmente en los días previos.
✔ Exponerse a la luz natural por la mañana para regular el ritmo circadiano.
✔ Evitar el consumo de cafeína y pantallas antes de dormir.
✔ Mantener una rutina de sueño constante para minimizar el impacto del ajuste.
A medida que nos preparamos para el cambio de horario, es importante recordar que, aunque al principio puede resultar un desafío, también nos brinda más luz en las tardes para disfrutar de actividades al aire libre y aprovechar mejor el día.