SARASOTA, Florida. Tras el informe de la necropsia sobre la muerte de un manatí en el Acuario y Laboratorio Marino de Mote, localizado en Sarasota a dos horas y media de Orlando, los funcionarios proporcionaron un relato detallado del último día de Hugh.
El informe de la necropsia indica que Hugh murió a causa de un desgarro de 14,5 centímetros en el colon causado por un encuentro sexual con otro manatí macho, Buffett.
Buffett es el hermano de Hugh. El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos afirma que Mote Marine Laboratory and Aquarium no actuó para proteger a Hugh, lo que lo llevó a la muerte.
Hugh tenía 38 años. Nació en Miami Seaquarium y llegó a Mote desde ZooTampa el 2 de mayo de 1996, donde se desempeñó como embajador de su especie y participó de manera rutinaria y voluntaria en estudios de investigación sobre manatíes.
Hugh y su hermano Buffett son los únicos manatíes del mundo que participan en una investigación de comportamiento detallada y voluntaria diseñada para ayudar a la conservación de los manatíes.
“Es importante que compartamos una descripción general de los hechos para garantizar una total claridad sobre la causa de la muerte de Hugh. A lo largo de los eventos que llevaron al fallecimiento de Hugh, Mote actuó dentro de los estándares y prácticas profesionales que hemos observado a lo largo de los 27 años que Hugh y Buffett han vivido juntos en Mote, y según lo recomendado por la Asociación de Zoológicos y Acuarios (AZA) y el Sociedad de Rescate y Rehabilitación de Manatíes (MRP)”, se escribe en el comunicado de prensa publicado en la página de Facebook de Mote.
El reporte de Mote dice que el 29 de abril, Hugh comenzó a mostrar un cambio de comportamiento y el personal comenzó a monitorearlo de cerca. Se volvió insensible.
El informe continua: El día del fallecimiento de Hugh, Hugh y Buffett se involucraron en un comportamiento de apareamiento natural, aunque aumentado, observado y documentado en manatíes tanto en cuidado administrado como en la naturaleza.
Esta fue la primera vez que se observó un comportamiento de apareamiento tan elevado entre los dos manatíes. Sin embargo, cada año, al igual que otros manatíes machos tanto en la naturaleza como en cuidados administrados, Hugh y Buffett exhibirían aproximadamente dos meses de cambios de comportamiento estacionales que incluyen, entre otros, un aumento en el comportamiento sexual.
Los manatíes estuvieron bajo estricta observación durante todo el día y el equipo de cuidado de los animales estuvo en comunicación constante y cercana con los veterinarios que los atendían y siguiendo sus instrucciones durante todo el día.
Se observó que Hugh y Buffett iniciaban y buscaban interacciones mutuamente a lo largo del día y no hubo signos evidentes de incomodidad o angustia, como escorazón, crujidos o evitación activa que habrían desencadenado la necesidad de una intervención.
Siguiendo las instrucciones de los veterinarios, se optó por la distracción en lugar de la separación física porque la separación había causado previamente una ansiedad indebida y efectos negativos en ambos manatíes.
En un esfuerzo por redirigir la atención de los manatíes y disminuir los comportamientos indeseables, el personal de cuidado de los animales utilizó herramientas de refuerzo positivo, como recompensas de alto valor y enriquecimiento que anteriormente habían tenido éxito.
Los funcionarios del USDA dicen que “representantes de las instalaciones, los empleados observaron un comportamiento sexual de alta intensidad entre dos manatíes machos adultos, lo que resultó en la penetración rectal del macho más pequeño, aproximadamente a las 10 am”, dice el informe.
Poco después de esta interacción, los empleados recolectaron una muestra fecal del macho más pequeño y confirmó la presencia de sangre fresca. La conducta sexual continuó a lo largo del día con períodos de descanso entre interacciones de alta intensidad y penetración ocasional. Aproximadamente a las 5:15 pm, se observó que el macho más grande penetraba nuevamente al macho más pequeño. Cuando el macho más grande se alejó nadando, se vio que el macho más pequeño no respondía en el fondo de la piscina. Se confirmó que había fallecido.
”El legado indeleble y duradero de Hugh será una contribución invaluable a la comprensión científica del comportamiento del manatí y las contribuciones a la conservación de su especie”, finaliza el comunicado de Mote.
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